Pasadas las 13 horas, empezó el acto en Plaza de Mayo del sindicalismo opositor contra el Gobierno Nacional. Sobre un palco ubicado frente al Cabildo, y una multitud desparramada hacia las diagonales Sur y Norte y la avenida de Mayo, el primer orador fue el secretario general de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo.
"Aquí están cientos de miles de trabajadores diciéndole no al gobierno y a las políticas de Mauricio Macri", arrancó Palazzo. "Hemos logrado la unidad en acción pese a que estamos en sectores distintos", dijo, y destacó la presencia de los distintos gremios mencionando la columna que representó a Smata.
"Se están afanando el país entero entre el gobierno y el Fondo Monetario Internacional", dijo Palazzo, y criticó la decisión del Banco Central de no informar el detalle diario de compra y venta de divisas. "Estamos ante la fuga de divisas más importante de la historia", afirmó.
"Cuando hablen de mafia miren hacia Balcarce 50 y no hacia los sindicatos", apuntó. "Hablan de terrorismo y golpismo porque marchamos los trabajadores, pero no se habla de la presión sobre el dólar y los precios; el movimiento obrero tiene que presionar; si quieren más paros, van a tener más paros", advirtió el dirigente bancario.
El secretario general adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, consideró que "el paro fue contundente en todo el país", y advirtió además que "si en 20 días no hay una respuesta vamos a decidir qué medidas vamos a tomar", al cerrar el acto en Plaza de Mayo en el marco del paro convocado por algunos gremios y las CTA, pero que no contó con el aval de la CGT.
El último orador del acto fue Pablo Moyano, quien destacó que "el paro no fue un capricho de algunos" gremialistas y remató: "Nosotros ratificamos que vamos a seguir peleando ante este Gobierno de ajuste y de hambre que solo recibe las órdenes del Fondo Monetario".
A referirse a la conciliación obligatoria dictada por el Ejecutivo a algunos gremios para que no se produzca la medida de fuerza, Moyano sentenció: "Qué se metan la multa en el culo. Siempre vamos a estar del lado de los trabajadores porque a nosotros no nos aprieta nadie".
"La realidad es que los trabajadores tienen hambre", señaló el sindicalista y referente del Frente Sindical Argentino al concluir con la advertencia de que "si en 20 días no hay respuestas, vamos a decidir en un congreso qué medidas vamos a tomar".