En un hecho totalmente repudiable, efectivos de la policía de Honduras le propinaron una brutal paliza a un hincha en las afueras del estadio Nacional de Tegucigalpa, donde se disputó la última edición del clásico entre Olimpia y Motagua.
Simpatizantes de ambos clubes mantuvieron un intenso enfrentamiento en las adyacencias de la cancha y los efectivos policiales intervinieron para disuadir a los violentos, pero la situación se les fue de las manos con un individuo que terminó convulsionando en pleno cruce de hinchadas.
El herido de gravedad, que recibió numerosos golpes en su rostro, fue trasladado al hospital más cercano.
Desde las fuerzas de seguridad hondureñas emitieron un comunicado en el que se refieren a los incidentes tras el clásico.