La primera ronda del Arnold Palmer Invitational fue testigo de la riesgosa acción del estadounidense Cody Gribble, quien sin rodeo alguno se animó a empujar con sus manos a un caimán que estaba dentro del campo de juego.
Tras una vuelta inicial para el olvido y ya sin mucho que perder, Gribble se convirtió en el protagonista de la jornada al interrumpir al reptil que tomaba sol en la parte izquierda del fairway del hoyo 6 del Bay Hill Club & Lodge.
"El caimán parecía que necesitaba hacer un poco de ejercicio", dijo Gribble, a lo que agregó: "Además, creo que quizá necesitaba un poco de adrenalina en medio de mi ronda. La verdad es que nunca tuve miedo".
Para sorpresa de propios y extraños, el comportamiento de Gribble tiene explicación: según el campeón del Sanderson Farms Championship 2016 y exmiembro del PGA Tour Latinoamérica, tocar caimanes dentro de la cancha es una costumbre que tiene desde niño junto a su familia.
