Según números a los que accedió el diario La Nación, durante los primeros seis meses de 2015 Aerolíneas Argentinas perdió alrededor de 2,45 millones de dólares si se suman todos los destinos que tocaron El Calafate.
En cambio, un año después la ecuación se invirtió: el casillero que marca el resultado operativo de ese destino quedó con una ganancia de 5,13 millones de dólares.
Las mayores pérdidas en 2015 pasaron por Austral, que anotó un pasivo de 1,76 millones de dólares, mientras que Aerolíneas Argentinas hizo lo propio con 784.000 dólares.
En el presente 2016 la línea aérea de bandera aportó con ese destino 5,27 millones de dólares, en tanto que la otra empresa del grupo perdió, con un par de frecuencias en el año, 144.100 dólares.
La nueva gestión que maneja Isela Costantini hizo algunos retoques en las rutas que llegan al exclusivo destino de Santa Cruz: la primera tiene que ver con que se viajó bastante menos. Mientras en los primeros seis meses del año pasado Mariano Recalde envió 1025 viajes con Aerolíneas y 114 con Austral, Costantini despachó 883 vuelos por la línea de bandera y 15 (sólo en mayo) por la otra compañía.
Sin embargo, gran parte de la mejora es que los pasajeros pagos mejoraron. En 2015 los servicios que en algunos de los puntos tocaron El Calafate transportaron 283 mil viajeros contra 306 mil que lo hicieron entre enero y junio de este año.