El partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores entre River y Boca se jugará el 9 de diciembre en el estadio del Real Madrid, el Santiago Bernabéu, a las 16:30 de Argentina (20:30 de España).
"La final se jugará en el Bernabéu el domingo 9, con las dos hinchadas", dijo en conferencia de prensa en Asunción el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez.
"España es el país que tiene la mayor comunidad argentina. Y Madrid está entre las ciudades más seguras del mundo, su aeropuerto es el que tiene más conectividad con Latinoamérica. Allí hay una gran cultura y tradición de fútbol", explicó Dominguez durante una conferencia de prensa
"Este es el deporte rey. Quienes conocemos esto y sabemos que solo es ganar o perder y no matar o morir estamos dando un paso hacia delante. Quiero empezar agradeciendo al presidente de España, Pedro Sánchez, a Infantino, Scheferin, y mi amigo Florentino Pérez", declaró.
El partido se jugará a puertas abiertas para los "amantes del fútbol", enfatizó Domínguez. Y agregó que no hubo ninguna posibilidad de reprogramar el partido en el Monumental, como debió jugarse el pasado 24 de noviembre tras el partido de ida que terminó 2-2 en La Bombonera.
"No hubo chance de que se jugase en El Monumental. Por una cuestión de protocolo y de seguridad", dijo.Domínguez agradeció la mediación del presidente de la FIFA, Gianni Infantino; el de la UEFA, Aleksander Ceferín; así como al del Real Madrid, Florentino Pérez.
Aseguró que la postulación del Bernabéu comenzó con una "charla personal con Florentino Pérez", que puso su cancha a disposición de la Conmebol.
Domínguez aseguró que con el traslado de la final a Madrid no se intentan generar recursos y aseguró que la cantidad que sobre de la organización se destinará a la creación de un fondo para erradicar la violencia del fútbol en Sudamérica.