El Departamento de Estado norteamericano acaba de dar a conocer su tradicional Informe global sobre Derechos Humanos. El reporte, esta vez, apunta directamente a las distintas formas de violencia contra las mujeres como uno de los principales problemas de Derechos Humanos en nuestro país.
Señala, específicamente, la falta de capacitación de policías y jueces para proteger a las víctimas y la "insuficiente respuesta judicial para frenar la violencia doméstica". Además, pone el ojo en uno de los reclamos más fuertes del "Paro internacional de mujeres" que se hará el miércoles al menos en 48 países: la desigualdad salarial.
En el capítulo sobre Argentina, el informe identifica a la corrupción, a la tortura policial y a la violencia contra las mujeres como los tres problemas principales del país. Resalta que, según los reportes remitidos por las organizaciones que defienden los derechos de las mujeres en Argentina, "las actitudes de la Policía, hospitales y de la Justicia hacia las sobrevivientes de violencia sexual muchas veces las revictimizan". Y destaca que las organizaciones reclaman por "la falta de interés" en entrenar a estas instituciones para proteger a las sobrevivientes y en reforzar las medidas contra los agresores.