Tras la suba del dólar, a partir de este sábado las petroleras empezaron a aplicar nuevos precios para naftas y gasoil. En el caso de YPF, ya tenía acordado los aumentos con el Gobierno. Sin embargo Shell, debió realizar reajustes por cambios en la carga impositiva.
La suba de precios se debe en una parte por el impuesto a la transferencia de los combustibles (ITC), cuya tasa dispone el ministerio de Hacienda. La otra es por el componente de biocombustibles. Ese importe lo decide el Poder Ejecutivo y también se incrementará un 1% desde mañana.
Por el momento, el litro de nafta súper está a $ 29,37 en las estaciones oficiales de YPF, pero todo parece indicar que subirá a más de $ 30. La "premium" cuesta $ 35.37, por lo que se la estima en $ 36. Mientras que el gasoil común está en $ 25.71, y se iría a $ 26. Ese mismo combustible, pero en variedad de mayor calidad, está a $ 31.
Los incrementos en los precios sucedieron luego de la escalada del dólar que superó los $40 para la venta. Sin embargo, para las petroleras queda pendiente una corrección mayor, vinculada a la devaluación del peso frente al dólar.