El Ministerio de Trabajo dictó esta noche la conciliación obligatoria en el conflicto por los más de 200 despidos de la empresa de computadoras Banghó, tras una audiencia entre las partes que se extendió toda la tarde y que fue convocada luego que la firma anunciara ayer el cierre de su planta ubicada en la localidad bonaerense de Vicente López.
La medida, dictada por 15 días hábiles, implica la reincorporación de los despedidos a partir del lunes, el pago de la presente quincena y la liberación de la planta, que fue ocupada por los trabajadores, a partir de esta noche, según aseguraron a Télam Emiliano Gallo, dirigente de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y fuentes de la empresa.
El sindicalista indicó, además, que entre mañana y el viernes, representantes del gremio y de la empresa se reunirán con los ministros de la Producción, Francisco Cabrera, y de Trabajo, Jorge Triaca.
Ayer, la empresa anunció el cierre de la fábrica y el despido de 205 trabajadores y fundamentó la decisión en la eliminación a partir del 31 de marzo próximo del arancel de 35 por ciento para la importación de productos informáticos, dispuesta por la Secretaría de Comercio, que "hace inviable la producción local ante la imposibilidad de competir con productos provenientes de países con altos subsidios a la exportación, como es el caso de China", según comunicó.
