Antes de la protesta contra el Gobierno, Hugo Moyano criticó duramente al Poder Ejecutivo y negó que el objetivo de la marcha sea tratar de influir en la Justicia. "Sería bastante idiota si creyera que con una movilización puedo evitar" las denuncias, dijo el jefe de Camioneros, quien aclaró que no está imputado en ninguna investigación.
La protesta se desarrolla en pleno avance de causas judiciales que involucran al jefe camionero por lavado de dinero, desvío de fondos en la obra social del sindicato y asociación ilícita por fraude al club Independiente, una investigación que además alcanza a su hijo Pablo Moyano. En la previa el Gobierno le reclamó que "dé respuestas en los tribunales y no use una marcha para tapar las causas".
Moyano cree que la protesta "va a ser "buena" y cuestionó sin nombrarlos a los dirigentes que se bajaron de la movilización, como dos de los líderes de la CGT, Héctor Daer (Sanidad) y Carlos Acuña (Estaciones de servicio), además de Luis Barrionuevo (Gastronómicos). "Cada uno es prisionero de lo que le dicta su conciencia", afirmó.
Además, al ser consultado sobre si estaba preocupado sobre las causas judiciales en las que está involucrado, respondió: "Estoy preocupado, ¿de qué? Estoy un poco preocupado esta noche cuando juguemos en Brasil".
Según informó TN, el sindicalista además evitó referirse a la posibilidad de un paro, pero no anunciará una medida de fuerza, algo que agitan desde las dos CTA. "No puedo hablar en nombre de otras organizaciones gremiales. Se verá pero por ahora no está en discusión", afirmó.