Diez obras sociales sindicales serán dadas de baja

La Superintendecia de Salud evaluó que tienen poco afiliados y son deficitarias. 

Héctor Daer habla junto a Carlos Acuña y a Juan Carlos Schmid.
Héctor Daer habla junto a Carlos Acuña y a Juan Carlos Schmid.

La Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) dará de baja diez obras sociales como primer paso para un mejor ordenamiento. La medida será llevada adelante mediante una resolución administrativa que reflejará esta semana el Boletín Oficial.

Esta decisión viene de la mano de los ajustes internos que buscará el Gobierno, impulsados por el presidente Mauricio Macri.

De las instituciones que serán dada de baja, cuatro corresponden al mundo académico.  La Obra Social del Personal de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco es una de las que dejará de funcionar. También abarca el plano sindical, como es la de Trabajadores de Prensa del Chaco y la de Papel Misionero.

La existencia de estas instituciones que se discontinuarán, de todos modos, no generaban una erogación de dinero público para sostenerlas pero sí implicaba gastos administrativos que discurren por el seguimiento que pueda hacerles la SSS. En algunos casos hay afiliados que siguen recibiendo prestaciones de esas instituciones pero fuentes vinculadas a la SSS indicaron que serán reasignados a otras instituciones. Aseguran que son entre 50 y 80 personas.

Esta prueba piloto a escala pequeña sirve para el próximo paso, que es el de confederar obras sociales: esto es que si un mismo sector, supongamos una industria, tiene varios gremios afines y cada uno con su obra social, la idea a futuro es que una sola institución de salud atienda a los afiliados de cada uno de esos sindicatos.

Hoy coexisten unas 300 obras sociales. Y un dato más para entender la magnitud del sistema: entre titulares y sus respectivos grupos familiares se atienden, a través del sistema de obras sociales, unas 25 millones de personas. El resto de la ciudadanía lo hace mediante prepagas o en los hospitales públicos.