El titular de la ANSES, Emilio Basavilbaso, celebró el consenso logrado ayer en el Senado con respecto a la fórmula de movilidad jubilatoria que podría empezar a aplicarse el año que viene.
La fórmula consensuada -que aún debe ser aprobada por ambas cámaras- arroja un índice que se compone en un 70% por el aumento de los precios y en un 30% por la Remuneración Promedio Imponible de los Trabajadores Estables (RIPTE).
"Algunos países tienen exactamente la misma fórmula; Finlandia, por ejemplo, tiene 80% de inflación y 20% de salarios", justificó Basavilbaso.
"Emilio, ¿cuánto gana un jubilado finlandés?", intentó frenar Novaresio al funcionario. Y el titular de la ANSES contestó: "En general nuestras jubilaciones son más altas que las del resto del mundo y las del resto de la región".
Actualmente, la jubilación mínima argentina es de $7.246 (alrededor de USD 400 o 335 euros). Finlandia cuenta con dos regímenes de pensiones: uno vinculado a los ingresos de los trabajadores y otro general que concede prestaciones mínimas a todos los residentes. Juntas, estas dos remuneraciones forman la pensión legal total.
La jubilación por ingresos es contributiva y depende de los aportes realizados durante la vida laboral a un fondo privado (similar a las antiguas AFJP de la Argentina).
Por otra parte, todos los habitantes del país que hayan cumplido 65 años y posean una residencia mínima de tres años tienen derecho a la pensión de vejez del régimen general, cuya remuneración mínima garantizada es en la actualidad de 753,58 euros, que equivalen a $16.164.