Victoria tiene 23 años y la semana pasada decidió iniciarse en una nueva disciplina de gimnasia llamada electrofitness, que promete poco esfuerzo en poco tiempo, es decir, 20 minutos de entrenamiento equivalen a tres horas de gimnasio.
Lo cierto es que la joven se anotó en un gimnasio de San Juan, sin pedirle un apto físico, y comenzó su primera clase de 20 minutos.
Tras los primeros ejercicios, sintió un fuerte dolor y le pidió a su entrenador que parara, pero éste le dijo que era normal y ella siguió.
Al día siguiente la joven amaneció con dolores que creyó que eran normales. Pero la alarma se encendió cuando comenzó a orinar de color marrón oscuro.
A medida que pasaban las horas, los dolores se intensificaron y Victoria decidió ir al médico donde quedó internada en terapia intensiva.