Luego de conseguir la clasificación al Mundial de Rusia 2018, Lionel Messi entregó su camiseta a la hinchada que llegó a Quito a alentar a la Selección. Increíblemente, el afortunado que se quedó con la casaca no se había percatado que era la 10 de "La Pulga".
El diario Olé habló con Sergio Cazes, uno de los presentes del hecho, que narró la insólita situación. "Vi cuando Messi se sacaba la remera para tirarla. Y pasó apenas arriba mío, lo no podía creer", comenzó diciendo.
"Vi al que la agarró y me acerqué. Le pregunté si sabía de quién era y él no tenía ni idea. Le dije: 'Fijate', entonces abrió la camiseta que venía como un bollo, vio que era de Messi y no lo podía creer, empezó a gritar de alegría. En ese momento pensé en comprársela pero dije no, después si lo hace se va a arrepentir", agregó.
"En ese momento no me di cuenta de que era venezolano, pero le dije que se la pusiera porque si no corría el riesgo de que se la quisieran sacar. Se la calzó y nos sacamos una foto. Y le dije: Cuidala porque ésta no es una camiseta más. Es la de Messi. Y no sólo eso. Es la de Messi el día que le metió tres a Ecuador y fuimos al Mundial", concluyó.
¡Increíble!