Viene de hace años dando tips de cocina en "El Gourmet" pero al explosión de "El gran premio de la cocina" llevó a Felicitas Pizarro a meterse de lleno en la cocina de los argentinos y a convertirse en una de las cocineras elegidas para cualquier receta durante la cuarentena.
En una entrevista con Vía País, la sommelier habló del desenlace de la octava temporada del certamen de El Trece, que terminó con el enojo de Dana Martucci por su segundo puesto, y también se refirió a su debilidad al momento de cocinar.
Ya con "el diario del lunes", Felicitas asume que se mostró sorprendida con la reacción de la participante e incluso reconoció que es una "gran cocinera". No obstante, aclaró: "No saldría a arruinar la competencia, ella estuvo en dos ocasiones y había cosas que si no le gustaban las hubiese dicho; siempre estamos dispuestos a escuchar. Eso sí me molesta y me choca".
Sobre el boom de "El gran premio de la cocina", Felicitas dijo que "fue cobrando importancia en la programación" y destacó: "Me gusta que la gente valore la cocina, esta cuarentena nos ha llevado a mirar para adentro y ver dónde compramos y otras cosas. Hay apasionados y haters que ven el programa, tambien están los que ven el programa para seguir las recetas".
También, destaca su trabajo en "Supera esto", donde compite para lograr el mejor plato con "rivales" de la talla de Christian y Roberto Petersen, Toño de Livier, Poncho Cadena, Zahie, Osvaldo Gross, Isabel Vermal. Margarita Bernal, Soledad Nardelli y Mauricio Asta.
"Arranqué en el canal hace un par de años y fui ganando confianza para estar de una manera diferente en 'Supera esto'. No es para cualquiera. En el programa me siento mucho más segura", opinó.
Al ser consultada sobre su talón de Aquiles en la cocina, no dudó en contestar que es "la pastelería" al reconocer que "es una cuenta pendiente". Y agregó: "Me había anotado para estudiar pero la pandemia me lo impidió. Soy jurado y quiero tocar todas las áreas".
Por último, Felicitas, quien está embaraza de casi seis meses de su segundo hijo, habló sobre su crecimiento en la televisión. "Al principio mo me gustaba lo que decía ni lo que cocinaba. Es distinto cocinar internamente en un restaurant, a tener que cocinar, conducir, hablar, ser simpático, dar los tips justos, no aburrir, redondear... Creo que tampoco es para todos, hay que tener una cuota de caradurismo", cerró.