En su programa del domingo, el periodista Jorge Lanata se expresó sobre los temas más destacados de la semana, entre ellos los dichos del presidente Alberto Fernández sobre el "discurso del odio" tras el banderazo del 9 de julio.
"Quería dirigirme al Presidente y decirle que realmente espero no odiar. Odiar es pequeño y miserable, y el odio se asemeja al amor en eso de no poder sacárselo nunca de encima. Yo me avergonzaría de mi odio, pero lo que quiero decirle es que tengo bronca, estoy enojado", comenzó Lanata su editorial.
"Me enoja que le hayan robado tanta plata a la gente y que ahora no solo salgan de la cárcel, sino que pretendan que se los felicite", dijo primero sobre Lázaro Báez, que obtuvo el beneficio de la prisión domiciliaria. "Me da bronca que crean que se puede construir un país en el que la Justicia no funcione", agregó.
"Me da bronca que ustedes, que fueron perseguidos gran parte de su vida por ser peronistas, no acepten una opinión distinta. Me da bronca lo cínico del relato y que a la gente no le propongan trabajo, sino limosna. Me da bronca que se sientan el pueblo cuando el pueblo somos todos", dijo después.
"Señor Presidente, no tengo odio, tengo bronca. Pero no se preocupe porque no es una bronca violenta, no voy a tomar ningún arma, como alguna vez hicieron ustedes. Como tengo bronca voy a tratar de ser mejor, voy a estudiar y laburar más, voy a esforzarme para que esto cambie. Y es probable que me pegue 100 veces más la cabeza contra la pared, pero algún día voy a empezar a ver cómo esto cambia", dijo finalmente.
El cruce Leuco-Cafiero
Tras la monólogo inicial, Lanata dio paso a su segmento de humor, que centró en el cruce mediático entre su colega Diego Leuco y el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
"Santiago Cafiero en la semana discutió con Diego Leuco en Telenoche y luego Alberto Fernández retuiteó un video con una burla bastante agresiva a Diego. Hay que recordarle a Alberto que él es el Presidente, no un tuitero más. Por ahí hay que decírselo por Twitter para que te dé bola. Alberto no podés retuitear esta incitación a la violencia, salvo que tengas de community manager al 'Pata Medina", dijo con acidez Lanata.
"Hace un par de meses, Fernández se había disculpado con Jony Viale diciendo que el retuit de un comentario agresivo había sido una equivocación del que le está manejando las redes. Pobre Alberto, tiene uno que le maneja las redes y una que le maneja el Gobierno", agregó.
Luego Lanata se explayó sobre el "banderazo" que hubo el jueves en varias ciudades del país: "La movilización fue convocada por redes y sorprendió por la cantidad de gente, tanto al Gobierno como a la oposición. La protesta tuvo múltiples reclamos: la inseguridad, Vicentin, la liberación de Lázaro, la crisis económica y porque la gente tiene los hue... llenos de estar en casa desde hace más de 100 días y cualquier plan es bueno para salir", dijo.
Sobre el "'neokit' que presentó el presidente, opinó: "El kit fue desarrollado por un consorcio entre científicos del Instituto Milstein y el laboratorio Cassará. Combo Nac & Pop. Esto se vendió como un paso más de la ciencia argentina hacia la 'soberanía tecnológica'. Un dato: el kit se hace con 100% de componentes importados, es decir, es como un electrodoméstico ensamblado en Tierra del Fuego. O sea que sí dependemos de insumos de afuera".
En un comunicado de Presidencia se había establecido que en un lapso de 10 días se producirían 10.000 test y en el corto plazo se podrían elaborar 100.000 por semana, sin embargo esto no ocurrió: "¿Cuál es la historia detrás del 'Neo Kit'? El test fue autorizado por la ANMAT, que es la autoridad reguladora pero a pedido de la Casa Rosada se solicitó que el Instituto Malbrán, por ser el centro técnico de referencia en estos temas, auditara el producto".
"En la primera prueba que hizo el Malbrán arrojó que daba un 50% de sensibilidad. Esto es un muy mal resultado. El test, por ejemplo, no distinguía el virus de una gripe común del COVID-19. Los desarrolladores del proyecto se enfurecieron y se armó lío interno en el Gobierno. Un sector dijo que Salvarezza apuró el test con fines políticos y otros dijeron que el ensayo del Malbrán tenía fallas de realización", agregó.
Ante eso Lanata manifestó: "El Instituto Milstein y Cassará solicitaron que se haga otra prueba y también estar presentes. En el medio se hicieron pequeños cambios, se introdujeron mejoras. En la última prueba que hizo el Malbrán arrojó una sensibilidad del 75% que tampoco es muy recomendable por el alto riesgo de falsos negativos".
Y concluyó que pese a todas estas fallas, el 'Neokit' sigue adelante: "Se hizo un lote de 3000 test que se repatrió para 'capacitación'. Pero está muy pero muy lejos de la promesa de Alberto de 100.000 kits por semana y de brillar como invento".