Las dos centrales sindicales del país, la CGT y la CTA, lo dejaron muy en claro: las empresas deben hacerse cargo de pagarles la conexión a internet, los elementos de trabajo (como las computadoras) y las horas extra a sus empleados, cuando estén trabajando desde sus casas.
Al reclamo lo plantearon durante la reunión por videoconferencia de la comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados, que empezó este martes a debatir 14 proyectos de ley que regulan el teletrabajo como modalidad para las distintas actividades económicas.
Las iniciativas fueron presentadas por legisladores del Frente de Todos y de distintos bloques de la oposición.
El tratamiento de estas propuestas se aceleró como consecuencia de la veloz y abrupta multiplicación del home office, en menos de tres meses, como reacción ante el aislamiento obligatorio dispuesto por el Gobierno nacional para frenar la expansión de la pandemia de Covid-19.
En ese contexto, este martes se realizó la primera reunión de la comisión de Legislación del Trabajo para discutir el régimen legal de teletrabajo, con la presencia en la misma sala de chat de decenas de líderes de sindicatos.
Por las centrales obreras estuvieron Héctor Daer y Juan Carlos Acuña, de la CGT; Hugo Yasky y Claudio Marín, dirigente de la CTA de los Trabajadores, y Ricardo Peidro, de la CTA Autónoma.
Este miércoles será el turno del ministro de Trabajo de la Nación, Claudio Moroni, quien se encargará de revelar la posición del gobierno de Alberto Fernández sobre la regulación del teletrabajo.
Qué dijeron los sindicalistas
Las 14 iniciativas presentadas por diputados establecen la regulación de la jornada laboral, el derecho a la desconexión digital, el consentimiento por escrito, el equipamiento, la compensación de gastos, el derecho a la intimidad y la seguridad e higiene, entre otras cuestiones.
Durante la reunión, Daer expresó el apoyo de la CGT a la iniciativa y resaltó que la redacción debe dejar muy en claro algunas cuestiones.
Por ejemplo, que el teletrabajo "es una modalidad laboral y no una actividad laboral" y que "toda compensación" de la empresa al trabajador por transferirle los costos de electricidad, internet y/o de herramientas de trabajo "debe ser excluida del cálculo de la cuarta categoría de Ganancias".
El líder cegetista también pidió que la ley procure la generación de puestos de trabajo a distancia dentro de la Argentina.
"Hay una cantidad de empresas, y no hablo de los call centers, que trasladan sus servicios de teletrabajo a otras latitudes buscando menores salarios y peores condiciones laborales y generando dumping en el comercio internacional y en nuestro país", dijo el también jefe del sindicato de la sanidad bonaerense.
A su turno, Claudio Marín, dirigente de la CTA de los Trabajadores, planteó lo que definió como "una situación terrible" que se observa desde el 20 de marzo, cuando se dictó el aislamiento en todo el territorio nacional.
"La jefatura, el gerente, el jefe de personal o quien fuera, están llamando a la casa de los compañeros, sábados, domingos, a las 10 de la noche, feriados, a la hora del almuerzo, a la hora del descanso. No se los respeta. 'Total, está a mano'. 'Total, se puede llamar'. Esto genera no solamente un estrés sino concretamente un aumento de la productividad y de la carga de trabajo. No es solamente un problema psicológico individual sino una extracción mayor de plusvalía", describió Marín.
En este sentido, dijo que "el trabajador, según la ley de Contrato de Trabajo, está a disposición el tiempo que el empleador pague, no el que no pague" y que si está desempeñándose en horarios que están "por fuera de su jornada, se deben pagar horas extraordinarias".
Sostuvo que "las herramientas de trabajo, tanto software como hardware, deben estar a cargo del empleador". "Inclusive, la conectividad. Y cuando digo a cargo digo a cargo. No estamos hablando de grandes cifras. Es muchísimo menos que lo que se ahorra el empleador en gastos de mobiliario, gas, electricidad, luz, con los edificios vacíos", completó.
El dirigente de la CTA también sostuvo que el trabajador que hoy está trabajando conectado desde su casa debe tener el derecho a "revertirlo si cambia la situación".
"Si yo tengo una mudanza, una refacción, un hijo que no tenía, un mayor a cargo y cambian las condiciones por las cuales pedí o acepté la condición de trabajar en el domicilio, tengo que tener el derecho a volver al trabajo de forma presencial. Si no, estamos condenando a despidos a una cantidad de trabajadores", planteó.
Cómo sigue
La presidenta de la comisión de Legislación de Trabajo, Vanesa Siley (Frente de Todos, confirmó la visita del ministro Moroni y de otros funcionarios nacionales, y la del senador Daniel Lovera, que se desempeña como presidente de la comisión homóloga en la Cámara Alta.
Las 14 iniciativas fueron presentadas por los diputados del Frente de Todos Walter Correa, Claudia Ormachea, Hugo Yasky, Facundo Moyano, Blanca Osuna, Eduardo Fernández, Silvana Ginocchio, Darío Martinez, Ayelén Sposito y Graciela Caselles, mientras que otros cuatro proyectos corresponden a los opositores Maximiliano Ferraro, Álvaro de Lamadrid, María Piccolomini y Natalia Villa, de Juntos por el Cambio.
La comisión había comenzado hace algunas semanas con reuniones de asesores para analizar los distintos proyectos y se compararon los temas centrales de cada iniciativa.
La intención de la comisión es buscar consensos para elaborar un posible dictamen unificado, ya que, dijeron, el objetivo es establecer presupuestos legales mínimos de regulación y dejar las cuestiones específicas en manos de las Convenciones Colectivas de Trabajo.