La constructora brasileña Odebrecht admitió haber pagado sobornos por unos 35 millones de dólares para ganar contratos de obra pública durante el kirchnerismo, entre ellos el soterramiento del ferrocarril Sarmiento, la construcción de gasoductos y de una planta potabilizadora en Tigre.
En el caso del Sarmiento, los "arrepentidos" admitieron que pagaron sobornos por al menos 3,3 millones al entorno directo de Julio De Vido, cuando lideraba el Ministerio de Planificación Federal, con el objetivo de asegurarse la megaobra. Sin embargo, esta suma podría llegar a los U$S 20 millones.
Según el diario La Nación, las revelaciones surgen de documentos con las confesiones de "delatores" de la investigación del Lava Jato, el mayor escándalo de corrupción de Brasil. En sus declaraciones, los involucrados explicaron que los pagos de sobornos se hicieron por etapas y mencionaron entre otros a Jorge "Corcho" Rodríguez.
La primera etapa de las coimas se produjo previo a que Odebrecht estuviera a cargo del consorcio del soterramiento. Ex ejecutivos de la constructora le adjudicaron a Iecsa, la empresa que pertenecía a Angelo Calcaterra, primo del presidente Mauricio Macri, la negociación de esos sobornos con el equipo de De Vido.
En cambio, en la segunda etapa, con la empresa brasileña a cargo del consorcio, los involucrados declararon que Rodríguez se encargó de "arreglar" las coimas con los funcionarios por el soterramiento, al igual que en los casos de la ampliación de los gasoductos norte y sur y la construcción de la planta de Paraná de las Palmas.
En tanto, todos estos casos son investigados por la Justicia Federal.