El ex secretario de transporte Ricardo Jaime inició una huelga de hambre la semana pasada en el penal de Ezeiza, después de que le fueran rechazados pedidos de excarcelación y prisión domiciliaria que presentó ante el temor de contagio de coronavirus. Finalmente, este domingo el Gobierno pidió a través de la Secretaría de Derechos Humanos la morigeración de su detención. Jaime solicitó su prisión domiciliaria en la casa de una de sus hijas en la calle Omaguacas 91, en Villa Carlos Paz.
La solicitud está firmada por Horacio Pietragalla Corti y por el director Nacional de Políticas contra la Violencia Institucional de la cartera, Mariano Przybylski.
Fuentes judiciales informaron que Jaime, quien fue condenado por la tragedia ferroviaria de Once, hizo el reclamo al Tribunal Oral Federal (TOF) 6 que lo juzga, entre otras cosas, por la supuesta compra de trenes chatarra a España y Portugal durante su gestión y por presunto enriquecimiento ilícito.
A través de un escrito, Jaime notificó a los jueces que inició su protesta la semana pasada, por lo que los magistrados de ese tribunal "libraron un oficio al Servicio Penitenciario Federal para que sea monitoreado su estado de salud", dijeron los portavoces.
La defensa oficial de Jaime había pedido la excarcelación o, en todo caso, el arresto domiciliario porque tiene 65 años y problemas de salud como hipertensión, cuadros cardíacos y respiratorios, por lo que se encuentra "dentro del denominado grupo de riesgo ante la expansión del Covid-19".
Jaime, quien fue secretario de Transporte entre 2003 y 2009, está condenado a ocho años de prisión por la tragedia del tren de Once, pero el Tribunal Oral Federal 6 lo juzga en la actualidad en un único debate oral por cinco causas de presunta corrupción, entre ellas enriquecimiento ilícito y la compra de vagones y repuestos inservibles para el ferrocarril Belgrano Cargas.