Bolsonaro destituyó a su ministro de Sanidad luego de semanas de discrepancias por la gestión de la crisis

Luiz Henrique Mandetta dejó el cargo a raíz de los recurrentes confrontes con el jefe de Estado en plena lucha contra el brote

Bolsonaro destituyó a su ministro de Sanidad luego de semanas de discrepancias por la gestión de la crisis
Coronavirus: Bolsonaro destituyó a su ministro de Sanidad tras semanas de discrepancias por la gestión de la crisis

En la tarde de este jueves se conoció que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, destituyó al ministro de Sanidad, Luiz Henrique Mandetta, tras semanas de discrepancias por la gestión de la crisis del coronavirus en el país latinoamericano. Lo reemplazará el oncólogo Nelson Teich.

"Quiero agradecer la oportunidad que se me dio para ser un gerente de nuestro sistema sanitario y gestionar la pandemia de coronavirus, el gran desafío al que se enfrenta nuestra sanidad", aseveró  el exministro en un mensaje difundido en su cuenta de Twitter.

A su vez aprovechó para "dar las gracias a todo el equipo del Ministerio de Sanidad" y desearle "éxito" al que sea su sucesor en el Ministerio. "Ruego a dios que bendiga nuestro país".

Según informaciones del diario local 'Folha de S. Paulo', el presidente pidió al oncólogo Nelson Teich sustituir a Mandetta, que llevaba al frente de la Cartera desde enero de 2019 y quien ha adquirido una mayor visibilidad debido a su gestión de la pandemia a pesar de que su postura ha chocado en reiteradas ocasiones con la del presidente.

Su destitución fue anunciada después de que este se reuniera con Bolsonaro y tras haber previsto que su salida del cargo era "inminente" debido a las discrepancias públicas con el mandatario brasileño.

"Debe ser hoy, como mucho, mañana", había dicho Mandetta cuando aún era miembro del Gobierno.

Por su parte, desde que se inició la crisis del Covid-19, Mandetta y Bolsonaro han evidenciado profundas diferencias sobre cómo se debe afrontar la crisis sanitaria. El exministro era partidario de adoptar medidas drásticas, tales como el confinamiento total de la población, algo que el presidente rechaza para no dañar la economía.

Brasil ha sobrepasado ya los 30.400 contagios por coronavirus y suma 1.924 fallecimientos tras registrar otros 188 muertos en las últimas 24 horas, según los datos difundidos por las administraciones de los distintos estados y recogidas por G1.