El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, decidió este sábado alargar el confinamiento de la población por la crisis del coronavirus con el objetivo de consolidar la tendencia a la baja que mostró la curva de contagios en la última semana, pese a que el número de fallecidos siguió en aumento, hasta llegar a los 11.744, mientras los infectados son casi 125.000.
Con los últimos datos de la evolución de la pandemia sobre la mesa, Sánchez consultó al comité científico que lo asesora, y tras esa reunión trasladó a los diferentes partidos a la oposición su decisión de extender por segunda vez hasta el 26 de abril, 15 días más, el estado de alarma que mantiene encerrados a 47 millones de ciudadanos en España.
La decisión del Gobierno, confirmada por los expertos del Ministerio de Sanidad, tendrá que ser ratificada la próxima semana por el Congreso de Diputados, donde Sánchez tendrá que negociar las condiciones con la oposición, que se muestra cada vez más crítica con su gestión de la crisis.
Una de las cuestiones claves es si España mantendrá el confinamiento total, con la restricción de la actividad productiva a lo esencial, algo excepcional que rige hace diez días o regresará a la situación anterior al 30 de abril.
También si como adelantó el Ministerio de Sanidad, Salvador Illia, se permitirá a los niños salir a dar paseos cortos, como en otros países vecinos.
Sánchez comparecerá en videoconferencia esta tarde y podría despejar cuáles son las intenciones de su Gobierno al respecto.
De acuerdo con los datos del Ministerio de Sanidad de España, el avance de la pandemia de coronavirus se sigue suavizando en España, donde este sábado se registraron 809 nuevos fallecidos, la cifra diaria más baja de la última semana, que eleva el total de víctimas fatales a 11.744.
La cifra de fallecidos es notablemente inferior a la jornada previa, cuando se registraron 123 muertos más, hasta llegar a los 932.
Los contagios también aumentan a un ritmo menor, con 7.026 nuevos infectados, que elevan el total a 124.736.
"El incremento de los contagios es de un 6% y esto confirma la tendencia a la baja de los últimos días", subrayó María José Sierra, número dos del Centro de Alertas y Emergencia Sanitarias de España.
"Esta semana estamos al rededor el 10% -hoy por debajo- respecto al 20% de las semanas anteriores", añadió la experta, quien también destacó que "los datos de hospitalizados también se están manteniendo o disminuyendo".
Según el balance de Sanidad, del total de infectados por Covid-19, 57.612 necesitaron hospitalización, de las cuales 6.532 tuvieron que acceder a las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), apenas 116 más que la jornada previa.
El dato que sigue alentando a las autoridades es el incremento de las altas médicas entre los diagnosticados, que ya son 34.219.
El objetivo principal del confinamiento es contener los contagios para evitar el colapso del sistema sanitario, especialmente en los lugares donde se produjeron los brotes más amplios, empezando por la Comunicad de Madrid, que concentra la mitad de los infectados, y siguiendo por Cataluña.
No obstante, los datos del Ministerio de Sanidad muestras que la presión en las UCI de los hospitales de la Comunidad de Madrid y Cataluña está bajando, aunque los profesionales sanitarios continúan trabajando al límite en términos de recursos humanos y materiales.
"Los datos mejorar, los ingresos de hoy son menos que ayer, no solo en Madrid", insistió Sierra.
Los expertos del Gobierno español subrayan que las medidas de distanciamiento social están teniendo efecto, pero también advierten que la transición para volver a la situación previa al confinamiento será progresiva.
En ese sentido, hay malas noticias para los amantes del fútbol, ya que el experto en epidemias de referencia del Gobierno catalán, Oriol Mitjà, aseguró este sábado que en declaraciones radiales que "no volvería a abrir el estadio Camp Nou" hasta el otoño, arrojando agua fría sobre las pretensiones de los directivos del FC Barcelona, referente del fútbol mundial, de volver a jugar esta temporada.