Brasil, que ya cuenta con 25 muertos y 1.546 casos de coronavirus, encendió las alertas sanitarias porque se registró un contaminado en una favela, Ciudad de Dios, en Río de Janeiro, un ambiente totalmente desconocido hasta ahora para el Covid-19 y donde las personas no tienen posibilidad de aislamiento y carecen en muchos casos de agua potable.
La nación con más muertos de América latina es Brasil: seis decesos ocurrieron en las últimas 24 horas en el estado de San Pablo, con lo cual aumentaron a 25 los fallecidos por el coronavirus en el país, donde los casos positivos subieron 37% en 24 horas, para alcanzar 1.546 personas infectadas.
De esta forma, Brasil sumó en un día 418 casos nuevos, entre ellos siete muertos, reveló el ministro de Salud, Luiz Mandetta.
El estado de San Pablo, el más poblado del país con 44 millones de habitantes, tiene 22 de las 25 muertes registradas, mientras las tres restantes corresponden al estado de Río de Janeiro.
El ministro defendió la línea del presidente Jair Bolsonaro contra la paralización de actividades adoptadas por gobernadores y alcaldes.
"Hay que tener sentido común, es necesario definir no dejar servicios esenciales para que no hagamos de la paralización total un remedio más duro que el propio virus, que ese remedio pueda hacer inviable nuestra vida", afirmó el ministro.
Fue un disparo más en la batalla de Bolsonaro contra los gobernadores que declararon medidas restrictivas. El 73% de la población quiere medidas de aislamiento y cuarentena, según una encuesta de la firma Datafolha.
El ministro Mandetta, del partido derechista Demócratas, se opuso a que los comedores escolares alteren su funcionamiento: "Esta es una enfermedad -dijo- que trajeron los ricos de los Alpes, del norte de Italia. Los ricos tienen las casas más estructuradas, la vida más estructurada. La gente pobre pasa por más dificultad, con casas pequeñas, alimentación deficiente tal vez."
Una de las favelas más famosas del mundo, Ciudad de Dios, cuyo nombre lleva la película de Fernando Meirelles, tiene el primer caso positivo.
En Brasil 14 millones de personas viven en favelas en todo el país y el virus, según el Ministerio, está en todo el país. En la ciudad de Río hay 960; en San Pablo más de mil.
"Yo vivo con dos hijas y tenemos un monoambiente; ¿cómo aislarme?", dijo una mujer en la favela de Rocinha, donde viven más de 120 mil personas y donde el sábado a la noche se oyó fuerte un cacerolazo para pedir la renuncia de Bolsonaro.
En las salitas de primeros auxilios de las favelas, el gobierno de Rio reforzó la información sobre los síntomas, a la vez que mantenía a las personas dentro de las casas, sobre todo porque los parques y las playas están cerradas al público.
El ministro de Salud, considerado un moderado, hoy mostró sus dientes al pedir la suspensión de las elecciones municipales de octubre, teniendo en cuenta que hasta agosto se estima que habrá crisis por el coronavirus.
"Hay intendentes tomando decisiones pensando en la reelección", dijo el ministro de Salud, que se subióa la ola en la que está surfeando Bolsonaro, de intentar mantener la actividad para que no colapse la economía, algo que ya está ocurriendo.