La Justicia de la Ciudad confirmó la condena de 66.300 pesos a la propietaria de un kiosco por el expendio de bebidas alcohólicas en horario prohibido y por no exhibir la documentación que establece el Régimen de Faltas.
El fallo fue tomado por la Sala II de la Cámara de Apelaciones en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad de Buenos Aires, que resolvió confirmar la pena económica de más de 66 mil pesos impuesta a la titular de la habilitación de un kiosco ubicado en la calle Junín al 600, en el barrio de Balvanera.
Los inspectores que labraron el acta por venta de alcohol en horas prohibidas relataron "haber visto como desde el interior del kiosco, a través de la reja, se vendían las bebidas alcohólicas, circunstancia que luego fue corroborada por el personal policial que los acompañaba en el procedimiento, identificando a los compradores como personas menores de edad, en un horario en el que no está permitida la venta de este tipo de bebidas".