Eddie es un perro de raza Pitbull que fue abandonado y posteriormente rescatado en Benton City, Estados Unidos. Cuando el animal fue llevado al veterinario, le diagnosticaron un cáncer terminal imposible de operar. Entonces, su dueña adoptiva, la oficial Brown, se propuso hacer feliz a su mascota el tiempo que pudiese.
"Pensamos qué querríamos para él y, por supuesto, ser un oficial de K-9 parecía ser una gran opción porque es un gran embajador", expresó su dueña, que es policía. Se realizó entonces un acto en el que el animal tuvo hasta que jurar hacer valer la ley ante el jefe de Pasco, Ken Roske.
Además, con motivo del festejo, Eddie recibió una canasta llena de juguetes, dulces y golosinas para consentirlo. Y además, comió en un conocido local de donas.
El animal, que tiene apenas más de un año, asistió a estudios de televisión y estuvo todo el día de su nombramiento, acompañando a las fuerzas de seguridad en sus recorridas de patrulla.