Lázaro Báez y dos de sus hijos, Luciana y Martín, deberán ir a juicio oral en la causa que los acusa por lavado de dinero, según dispuso el juez Sebastián Casanello.
Es una causa vinculada a "la ruta del dinero K", que investiga el pago de sumas millonarias de la familia Báez a través de la firma M&P, con Austral Construcciones y otras sociedades, informó Clarín.
Los cuatro hijos del empresario K enfrentan un juicio por lavado de dinero junto a su padre, y están procesados y embargados cada uno por 600 millones de dólares. Pero solo Lázaro y su hijo mayor, Martín, están detenidos.
Ahora la situación se complica para dos de los herederos de Báez: el mismo Martín, y Luciana, la que le sigue en edad. Casanello los procesó por lavado de dinero y a pedido del fiscal Guillermo Marijuan, los envió junto a su padre a juicio oral.
En este causa, la Justicia detectó transferencia de sumas millonarias por "venta de asfalto" a Austral Construcciones (de Báez), de la cual Luciana y Martín son autoridades. Además, se analizaron un centenar de cheques por cerca de 9 millones de pesos y documentación que registra la extracción de dinero por un millón de pesos.