Martiniano Molina no consiguió la reelección en el municipio de Quilmes y al momento de reconocer la derrota comenzó una curiosa arenga para alentar a sus seguidores.
El referente del oficialismo en ese distrito bonaerense entonó uno de los cánticos típicos de los militantes del kirchnerismo, "Vamos a volver".
"Si quieren también pueden cantar una linda canción", les propuso y luego coreó: "Ohhh, vamos a volver, a volver, a volver, vamos a volver".
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Molina admitió de esta manera el triunfo de su rival, la camporista Mayra Mendoza, y manifestó su "más absoluto compromiso de seguir trabajando por y para Quilmes".
El cocinero cosechó el 43,16% de los votos, según los datos reportados con el 92,63% de las mesas escrutadas, y quedó así en el segundo lugar con una diferencia de 6,39 puntos.
Mendoza se convirtió en la próxima intendenta de Quilmes con el 49,55% de los votos y en la primera mujer en gobernar ese distrito del conurbano bonaerense.
