En el Frente de Todos, ya se preparan para la posible victoria de Alberto Fernández en las elecciones presidenciales y para festejar en la madrugada del 28 de otubre. Pero, también, ya están preocupados por la mañana del primer lunes de la gestión, en la que empezarán a tender puentes con el oficialismo y pondrán en acción a sus legisladores nacionales. En este contexto, son dos las leyes que quieren que el Congreso vote antes del recambio y una después del 10 de diciembre.
El propio Alberto Fernández, al lanzar el Plan Argentina contra el Hambre, afirmó que hay varias iniciativas que no necesitan más que la decisión política de los bloques del Congreso para ser aprobadas. Se refería principalmente a la Ley de Góndolas, uno de los proyectos que quiere que se sancionen. La propuesta apunta a hacer más accesibles los productos que integran la canasta básica, que no haya monopolios en las góndolas y garantizar el acceso a los alimentos y su calidad. Incluye también la apertura de espacios en los supermercados para los productores de la llamada "economía social", lo que tendría el doble beneficio de estimular ese tipo de empleo y ofrecer una mayor competencia entre los productos y una mejor calidad.
Esta semana, en un intento por reactivar al Congreso, se intentó avanzar con el otro proyecto de ley que interesa al Frente de Todos, pero fracasó. Se trata de la Ley de Alquileres. En el peronismo, están del lado de los inquilinos. Después del 27, volverán a insistir para consensuar varias iniciativas que tienen estado parlamentario, entre ellas, una para que se amplíe el contrato mínimo de alquiler de dos a tres años, que el precio se reajuste en forma anual, que la comisión a la inmobiliaria la pague el propietario y que haya un solo mes de depósito en concepto de garantía (que el dueño debe devolver a valor actualizado al finalizar el contrato). El objetivo principal es bajar los gastos a siete millones de inquilinos en todo el país.
El tercer proyecto de ley a tratar apenas asuma el nuevo Presidente será el Presupuesto Nacional. El albertismo quiere aprobrarlo después del 10 de diciembre, tras estudiarlo profundamente y analizar la "herencia" que reciba, en caso de ganar.
Por ahora, no hablan mucho sobre el pago de la deuda, pero es otro tema que podría tratar el Congreso o renegociarse en el próximo mandato.
El propio candidato a presidente del Frente de Todos habló de las "ansiedades" en la sociedad. Algunas definió como "urgentes", como la pobreza y el hambre. Otras distintas, señaló, son las ansiedades de los mercados, a los que les pidió calma para el día después a la elección nacional.