El presidente Mauricio Macri admitió hoy que la Argentina atraviesa un "momento difícil", el cual adjudicó a "un punto de partida muy malo" de su gestión. Sin embargo, sostuvo que el año que viene habrá una inflación "por debajo del 20 por ciento", y que "en unos años" no superará "un dígito, como en un país normal".
"Prometí que en el segundo semestre iba a bajar drásticamente la inflación, y lo hemos hecho con éxito. Hoy estamos en niveles de 1,5% mensual. El año que viene vamos a estar por debajo del 20%, lo que seis meses atrás a muchos les parecía imposible", pronosticó durante un acto en la localidad cordobesa de Hernando.
Según sostuvo, la Argentina está "pasando un momento difícil, porque el punto de partida fue muy malo, pero con todo el entusiasmo, con toda la convicción de los argentinos, estamos pasando este puente hacia la Argentina del futuro".