A un tiempo de su salida de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini habló por primera vez sobre los motivos y su gestión en la aerolínea de bandera.
"Yo no me fui, eso es importante. Mucho se habló y no quise salir a hablar. Fue una decisión de mi jefe, del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich", dijo en diálogo con La Nación. Y añadió: "Teníamos backgrounds diferentes y eso va generando un desgaste y un quiebre de confianza".
La ex funcionaria del equipo de Mauricio Macri reveló: "Fue un momento difícil, los resultados habían sido muy buenos, fue como un choque frontal, jamás me había pasado". "Mi desafío era convertir esta empresa, sanearla y ser reconocidos a nivel internacional, que realmente tuviera su espacio a nivel global", agregó Costantini.
"Lo que más me dolió y es parte de decir 'es momento de hablar', es la cantidad de mensajes que recibí de empleados de Aerolíneas, de ciudadanos que me agradecían por el aporte, por la gestión. Dí todo lo que podía de mí misma, creo que Aerolíneas es una empresa viable. Dentro de todos los logros, habíamos logrado la credibilidad", remarcó.
Emocionada, recordó aquel día en el que fue despedida de la empresa: "Es doloroso, sentí como que me quedaba debiéndoles algo a todo el equipo de Aerolíneas. Siento que les dejé algo importante a cada uno y eso es que son capaces de llevar la empresa adelante. Fue una sensación de dolor, de desgarro".
"Necesito trabajar, no solamente por el aporte financiero, porque es mi realización... es sentir que soy productiva. Tengo 45 años, dos chicos chicos, no estoy hecha", enfrentó sobre su futuro laboral.
"Tengo una propuesta bastante diferente de tratar de armar una holding, estoy entrando con una consultoría diferente. GM me llamó al dia siguiente [de su salida de Aerolíneas], me llamaron de otras empresas, pero quiero quedarme en la Argentina, quiero que mis hijos crezcan acá, quiero que mi país crezca", concluyó.