Tras el caso de la mujer a quién le amputaron la pierna equivocada en el Nuevo Sanatorio Berazategui, ubicado en la homónima localidad bonaerense, y de la jubilada a la que le quitaron por error la vesícula, la clínica comenzó a recibir una gran cantidad de denuncias por mala praxis que involucran la muerte de los pacientes.
Este jueves, se conoció un nuevo caso: Dionisia Caballero tenía 64 años en mayo de 2018, cuando sufrió la fractura expuesta del brazo derecho por un accidente doméstico. Los médicos recomendaron operarla para colocarle una placa de metal. Ingresó al quirófano por la fractura, pero salió tres horas después con una traqueotomía y en estado vegetativo, según indicó Infobae.
Cuando la mujer ingresó a la clínica, los médicos informaron que deberían realizar dos intervenciones, una para limpiar la zona y otra para colocar una prótesis provista por PAMI. La primera de las operaciones se llevó a cabo sin problemas, pero en la segunda surgieron las complicaciones: la mujer sufrió un paro cardiorrespiratorio, por lo que el cirujano le practicó una traqueotomía. Dionisia quedó en estado vegetativo.
"Tres días estuvo así hasta que finalmente murió. Encima los médicos decían que nos quedáramos tranquilos que si ella era fuerte iba a salir cuando claramente el cuadro era irreversible. Nunca dieron una explicación adecuada", comentó un allegado a la familia.
La única teoría que llegaron a esbozarle los médicos al esposo y los hijos de Dionisia es que todo se habría complicado porque la mujer tenía sobrepeso y fumaba.
La abogada que está representando los mencionados casos, Paola Stekloff, anunció que en los próximos días serán presentadas al menos ocho nuevas denuncias. "Creemos que esta vez el problema pudo ser la cantidad de anestesia suministrada", dijo la letrada.