Cristina Fernández de Kirchner pidió ir a juicio oral en la causa de los 'Cuadernos de las coimas'. Carlos Beraldi, abogado de la senadora de Unidad Ciudadana, le entregó al juez federal Claudio Bonadio un documento en el que advierte sobre lo que considera es "la ausencia manifiesta de un órgano jurisdiccional que en esta instancia pueda reparar" la cadena de "ilicitudes" de la investigación.
La precandidata a vicepresidenta del "Frente de Todos" está procesada como jefa de una asociación ilícita y 27 hechos de cohecho, en la causa que investiga el pago de sobornos millonarios de parte de empresarios de la obra pública, viales y de la energía a funcionarios kirchneristas para asegurarse contratos del Estado.
Bonadio había dado por cerrada la investigación de manera parcial y pedido opinión a las partes sobre si correspondía enviar la causa a sorteo de un Tribunal Oral o si restaba presentar alguna medida de prueba.
Para la defensa es "imprescindible" pasar a la instancia de juicio oral en esta causa para exigir "una vez más, el restablecimiento de los principios constitucionales que hacen al debido proceso legal, del que deben gozar todos los habitantes de la Nación, sin excepción alguna".
En el escrito, Beraldi argumentó: "En condiciones normales, la posibilidad de que estas actuaciones pudieran ser elevadas a juicio, en términos jurídicos, resultaría absurda. Ello así, pues todo lo actuado es insanablemente nulo, al haberse vulnerado todas y cada una de las garantías previstas en la Constitución Nacional".
Por otra parte, Beraldi aludió a "detenciones arbitrarias a mansalva" y cuestionó la forma en que se usó la llamada "ley del arrepentido", que según él "terminó siendo utilizada como un medio coactivo no sólo para arrancar supuestas confesiones a los imputados, sino también para manipular sus dichos, siempre en una misma dirección: imputar, como sea y por cualquier delito, a mi representada", advirtió el letrado.
Cabe recordar que el caso se originó por las anotaciones que hizo en una serie de cuadernos Oscar Centeno, el chofer de Roberto Baratta, quien era mano derecha del exministro de Planificación Federal, Julio De Vido.
La defensa apuntó además contra las anotaciones de Centeno: "La causa se inició a partir de un supuesto elemento de prueba obtenido por medios ilegales: los presuntos cuadernos del chofer Oscar Centeno. Según fue informado, estas presuntas anotaciones habrían sido sustraídas a su titular por el exsargento de la Policía Federal Argentina, Jorge Bacigalupo, para luego ser entregadas al periodista Diego Cabot", cuestionaron.
Si es elevada a juicio oral, la causa dejará de estar en manos del juez Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli, y la expresidenta Kirchner se sentará nuevamente en el banquillo de los acusados, como ya lo está haciendo en el Tribunal Oral Federal 2 por la causa Vialidad, en la que se investiga el presunto desvió de obras públicas en Santa Cruz a favor del empresario Lázaro Báez.
Con la colaboración de la Corresponsalía Buenos Aires