El Gobierno de Río Negro propuso este lunes la quita total del pago de Ingresos Brutos para la producción de peras y manzanas, a través de un proyecto de ley que será elevado en las próximas horas a la legislatura provincial.
Por otra parte, fuentes cercanas a la gobernación detallaron que la iniciativa también dispone adherir a la suspensión del consenso fiscal firmado entre la Nación y las provincias.
"Es el gran motor de generación de mano de obra intensiva y contención social, con más de 200 jornales por hectárea en todas las etapas", consideró la gobernadora Arabela Carreras respecto a la producción frutícola rionegrina.
La medida suma beneficios para productores agropecuarios, forestales, contratistas rurales, galpones de empaque, frigoríficos, bodegas, jugueras, pescadores, fábricas de hielo, elaboración de envases, productores mineros y aserraderos, entre otros.
Según se informó la propuesta "mejora la competitividad de las empresas reduciendo el impacto negativo que genera ese impuesto, en los insumos necesarios para la producción de bienes exportables".
La medida busca un impacto en la baja del precio en el mercado interno, que genera una ventaja comparativa al productor rionegrino.
"La fruticultura en particular ofrece materia prima a un sinfín de industrias que están gravadas, por lo que no podemos poner en riesgo a la principal proveedora del resto de los servicios", explicó la gobernadora.
La mandataria rionegrina agregó: "No podemos mirar a la fruticultura como una mera actividad primaria, sino como una de alto valor agregado".
Desde el gobierno aseguraron que "esta medida va en sintonía con la implementación del Plan Nacional de Lucha contra el Hambre, puesto en marcha por el Gobierno Nacional y donde la provincia tendrá una fuerte participación".