Una mañana tensa se vivió este viernes, luego de la presencia de la Policía de Río Negro con topadoras en el loteo Silva, para arrasar con las precarias viviendas erguidas por sus ocupantes entre el barrio Alvarez Guerrero (ex loteo Silva) y la ex cancha de fútbol del club Fátima el dos de enero de este año.
"Siempre hicimos todo de manera pacífica. No era necesario que vengan y rompan todo esto que para ellos son palo y chapa pero para la gente son días y meses de trabajo. Estoy muy indignado por cómo tratan a las personas", criticó con evidente furia Alejandro, vecino del lugar.
"La gente no tiene donde vivir. La gente está hacinada. Si no se terminaron la casilla es por la situación del país. Están peor que antes. El Estado hizo un abandono total. Esto era un basural. No se preocupan por la gente", continuó indignado.
El fiscal Guillermo González Sacco, por otro lado, advirtió que las casillas demolidas son las que pertenecen a gente que no habita en el lugar. "Si te comprometés a que me desaparecen esas cuestiones y queda la gente que efectivamente está viviendo podemos avanzar de otra manera. Eso ya lo hablamos. Respetame la palabra y respeto la mía. En 48 horas no quiero esa gente", avisó.
"En todas estas casillas no había absolutamente nada. La idea no es desalojar a la gente. Lo que queríamos era remover las cosas. Se respetó donde había gente. La idea era quitar las construcciones que no estaban habitadas por nadie", evidenció ante la prensa.
Las tierras son reclamadas por la familia Silva, que inició una denuncia penal apenas dio inicio la usurpación por parte de 50 individuos.