El exigente cronograma electoral en el país, con la mayoría de las provincias con elecciones desdobladas de la nacional, tiene en alerta al oficialismo. En menos de un mes, el 17 de febrero, se realizarán las primeras PASO del 2019 en la provincia de La Pampa, lo que irá configurando la plataforma hacia las elecciones donde Mauricio Macri competirá por la reelección, una situación inédita en la Argentina para un candidato que no es peronista.
Según fuentes de gobierno, en líneas generales podría decirse que Cambiemos está convencido de que ganará las cinco provincias que ya gobierna, es decir, Buenos Aires, Ciudad de Buenos Aires, Corrientes, Mendoza y Jujuy. Aquí, la discusión es si habrá o no adelantamiento de elecciones en los distritos gobernados por la coalición gobernante.
La duda que existe en el mundo político es si Cambiemos está en condiciones de aumentar la cantidad de distritos que gobierna, de modo de evitar una avalancha de derrotas antes de la elección nacional. Cambiemos piensa que sí. En concreto, las fuentes consultadas por Infobae creen que hay condiciones de ganar en "por lo menos, y siendo conservadores", cinco provincias más. Ese sería el objetivo. Y dividen los distritos en lotes de "imposibles", "dudosos", "posibles".
Entre las provincias posibles incluyen a Santa Cruz, Chubut, Salta, La Rioja, Tucuman, Neuquen, Entre Ríos, San Juan y San Luis.
Una incógnita son provincias que más de una vez estuvieron a tiro del triunfo como Santa Fe, donde hay ganas de -finalmente- alcanzar la gobernación, y Córdoba, donde hay buenos candidatos pero también una buena gestión del peronista Juan Schiaretti. En cambio, creen que en San Juan, donde competirá el intendente de Santa Lucía, Marcelo Orrego, podrán tener una oferta competitiva para disputar contra el actual gobernador, Sergio Uñac.
En tanto a otros distritos los consideran como "imposibles" se ven definitivamente muy difíciles, empezando por La Pampa, donde el gobernador Carlos Verna apuró las elecciones para impedir el posicionamiento de los candidatos de Cambiemos, siguiendo por Misiones, donde el senador Humberto Schiavoni tendrá dificultades para descontar diferencias contra el actual vicegobernador. Tampoco parece posible ganar en Catamarca, Santiago del Estero y finalmente Tierra del Fuego.
En esta última estuvo presente el Jefe de Estado días atrás y ni siquiera fue recibido por la actual Gobernadora Rosana Bertone, quien forma parte del grupo de gobernadores "peronistas no kirchneristas", recordó que el espacio "comenzó a formarse por dos condiciones: gobernar una provincia y tener problemas con el gobierno nacional".
Bertone aseguró que "si el peronismo 'va dividido' perderá la elección frente a Cambiemos. No se puede desconocer el aporte de votos de Cristina. Ignorar eso sería absurdo", advirtió. Sobre las chances del PJ en 2019, sostuvo que "una ventaja son los incumplimientos de las promesas de campaña del presidente Macri".