El rompehielos Almirante Irízar llegó ayer viernes a la ciudad de Ushuaia para continuar desde este sábado con la segunda etapa de la Campaña Antártica de Verano (CAV) 2019/2020, reabastecerse de víveres y combustibles, e informaron que la tripulación subió a bordo a la Virgen de Luján que estuvo en la guerra de Malvinas, en 1982, para llevarla a una peregrinación por las diferentes bases antárticas argentinas.
"Llevar a peregrinar a la virgen malvinera es un enorme orgullo y privilegio para nosotros. Estimamos poder transportarla a las seis bases permanentes de la Argentina y vamos hacer un esfuerzo para que también pueda estar en algunas bases temporarias", explicó a la prensa el comandante del Componente Naval, capitán de navío Carlos María Allievi.
La imagen religiosa que acompañó a los ex combatientes en el campo de batalla y que fue regresada por Gran Bretaña al Papa Francisco en octubre de 2019, se encuentra en Tierra del Fuego desde el 28 de diciembre, adonde llegó desde la provincia de Santa Cruz y fue el centro de numerosas ceremonias y homenajes en Río Grande y Ushuaia.
Según dijeron las autoridades navales del Irízar, es probable que la escultura venerada -de 38 centímetros de altura- regrese desde la Antártida en un avión Hércules de la Fuerza Aérea Argentina, luego de permanecer unos días en la Base Marambio.
El rompehielos que zarpó desde Buenos Aires el 4 de enero, luego de ser visitado el día anterior por el presidente Alberto Fernández y por el ministro de Defensa, Agustín Rossi, llegó a la capital fueguina esta mañana, y recaló en el muelle de combustibles Orión de la empresa YPF, donde la tripulación tuvo contacto con la prensa.
El buque cumplió la primera etapa de la CAV desde el 14 de noviembre hasta el 20 de diciembre, reabasteciendo las bases Marambio, Esperanza y Carlini, y abriendo las bases temporales Primavera, Brown y Petrel.
Por su parte desde mañana se dirigirá nuevamente a Carlini, pero también a Orcadas, Esperanza y Belgrano 2, la base más austral de todas ubicada a 1000 kilómetros del Polo Sur y a la que solo se llega después de atravesar un mar congelado.
"En cada sitio, además del reaprovisionamiento de víveres y materiales, se desplegará el personal que invernará este año. Estimamos que esta segunda fase concluirá cerca del 20 de febrero", explicó Allievi.
En tanto, el capitán del Irízar, capitán de fragata Maximiliano Mangiaterra, contó que en la tercera campaña consecutiva desde que el barco fue sometido a un extenso plan de reparación y modernización, la nave se encuentra "en el 100% de sus condiciones operativas y funcionales".
"Seguimos aprovechando la tecnología de punta con que cuenta este rompehielos en la actualidad, desde los sistemas electrónicos de su puente de comando, hasta el sistema de propulsión diésel y eléctrico automatizado que le asegura su capacidad de ruptura de hielo", mencionó Mangiaterra.
La embarcación de la Armada traslada a bordo a 295 personas, incluyendo sus 111 tripulantes, 30 científicos y personal para las bases antárticas.