“Esta semana pasada yo le he pedido a EDET (Empresa de Distribución Eléctrica de Tucumán S.A.) y a TRASNOA (Transporte de Energía Eléctrica por Distribución Troncal del Noroeste Argentino) un plan de contingencia, que se ha armado en 15 días. Han puesto 12 tráilers semirremolques, con generadores que suman 20 megavatios de producción, que están colocados en Cruz del Norte, 5(MW), en Cevil Pozo 5(MW) y 10 en el sur, en Villa Quinteros, para que no se vuelva a caer Concepción y Aguilares”. Estos conceptos corresponden al secretario de Energía de la provincia, ingeniero José Ascarate, quien fue legislador radical hasta el mes de octubre. El flamante funcionario comentó que “hemos pasado dos días con 37 grados y 42 grados de térmica. No salió de servicio ninguna línea de media y alta tensión. Y ninguna línea se ha caído. Hemos tenido cortes locales, si, hemos tenido tormentas eléctricas, donde saltan fusibles en los transformadores, si”. Azcarate hizo estas afirmaciones en el programa Primer Plano donde se explayó sobre las inversiones que hicieron las empresas para evitar cortes en el servicio en este verano. Este es el primer funcionario del gobierno de Osvaldo Jaldo que explica con claridad el funcionamiento del sistema eléctrico en la provincia. Además, aclara conceptos referidos a los cortes y por qué no se volverían a producir. Parte de la conversación con el funcionario:
--Se acercan los calores. ¿Qué pasará en Tucumán?
--Tucumán tiene 780 (MW) hasta 800 (MW), que produce entre el Bracho, Central Independencia, las dos hidroeléctricas. Y digamos, que nuestro consumo pico ha llegado a 775, hace dos semanas, cuando se ha caído parte de la línea. Cayó el sistema y quedó fuera de servicio Concepción, Aguilares, porque se cayó la estación transformadora de Villa Quinteros. La Línea de Bracho-Villa Quinteros. Cuando digo cayó es que salen de servicio.
--Vamos a tener este verano cortes programados?
--Si hacemos esto que estamos programando, no habrá, pero a coste de las empresas. Las empresas que son las transportadoras y las distribuidoras deben invertir para que el sistema no caiga y no quede fuera de servicio y ningún tucumano se vea afectado.
--¿Y por qué hubo algunos cortes?
--En Tucumán el tema es sencillo. Cuando superamos una térmica de 40 grados, es decir temperaturas con 36 o 37 grados, con sensaciones térmicas arriba de 40 grados, el consumo pasa de 750 a 770 megavatios horas, que es el límite. Y hay momentos, que por la térmica alta, se pierde eficiencia en el rendimiento, en los equipos conductores, en los cables, que son de hecho, conductores que se calientan, pero además se pierde eficiencia en los transformadores. Llega el momento, que la pérdida de eficiencia del 7 u el 8 por ciento, hace que caiga una estación transformadora completa. Como nos ha pasado en Villa Quinteros.
--¿Que hay que hacer entonces?
--Bueno, colocarle a esas subestaciones transformadoras y estaciones transformadoras, equipos, como estamos haciendo ahora, que inyecten potencia en el momento que pasamos los 760 megavatios. En Tucumán era típico: dos días de calor con térmicas altas, había corte de luz de 4 u 8 horas. Hace dos días hemos tenido una prueba y nos ha funcionado a la perfección.