Se ha registrado en Tucumán, un aumento en las consultas sobre los tratamientos de eliminación de tatuajes, sobre todo en los brazos.
El dato surge de un informe que se difundió sobre el hospital Néstor Kirchner, donde se realizán cirugías reconstructivas, secuelas de quemaduras, cicatrización queloide, malformaciones de algunas patologías de labios y la remoción de tatuajes, según detalló Matias Giudice, jefe de la Unidad de Cirugía Plástica.
El médico comentó, que el número de personas que requiere la eliminación de tatuajes creció ya que "necesitan resecárselo en la mayoría de los casos, porque están por ingresar a la Policía o a la Armada. Muchos tiene comprometido la circunferencia total del brazo, lo que requiere otro tipo de tratamiento", contó Giudice.
Otro de los tratamientos que realizan habitualmente es para la extirpación de cicatrices queloides, que son más frecuentes en mujeres, a raíz de lesiones como las que quedan después de la perforación del lóbulo de la oreja, la vacunación de la BCG, o de cirugías abdominales.
La mayoría de estas prácticas médicas se realizan en pacientes que son derivados de otros centros de mayor complejidad para descentralizar la atención de hospitales como el Padilla y el Centro de la Salud.