Atlético sumó una victoria vital para mantenerse con chances de clasificar a octavos y quedarse con el segundo puesto del grupo C de la Copa Libertadores. Sin ser una actuación descollante, le alcanzó para ganar cómodamente por 3 a 0 a The Strongest.
La figura sobresaliente de la cancha fue Luis Miguel Rodríguez, que a sus 33 años sigue brillando y marcó un tanto en el triunfo, además de participar activamente en la construcción de los otros dos tantos. "Sabíamos que estaban esos espacios en el fondo y que debíamos aprovecharlos. En el primer gol la dejo pasar porque intuyo que el defensor va a venir hacia mí, y ahí queda solo Leandro, que por suerte definió muy bien. Eso fue clave para abrir partido y que hubiera más espacios", manifestó.
El delantero también realizó un balance del encuentro y ponderó la manera de jugar el encuentro que tuvo Atlético. "Era un partido importantísimo para nosotros, una verdadera final. Lo entendimos así y lo jugamos de esa forma. Marcar dos goles en el primer tiempo nos permitió manejar el partido con más tranquilidad. Después se nos vinieron un poco en el segundo tiempo, pero terminamos siendo justos ganadores", analizó.
Lejos de sentirse cómodo con el mote de ídolo, el Pulguita expresó: "me siento uno más dentro de este plantel. Hace mucho que estoy en este club, y con un poco de fútbol uno trata de devolverle la alegría que nos da la gente. Si Dios quiere, daremos pelea hasta el final", finalizó el goleador.