Efectivos de la División Robos y Hurtos de la Unidad de Investigaciones de la Policía, secuestraron un automóvil y elementos del uniforme policial que utilizaron delincuentes de una peligrosa banda para asaltar la vivienda de un propietario de una carnicería, llevándose un millón de pesos, en abril pasado. Mientras tanto, continúan detrás de los pasos de al menos ocho miembros de este grupo.
En ese sentido, y tras intensas averiguaciones, los investigadores lograron secuestrar el automóvil en el que se habían movilizado el día del asalto, además de dos gorras de policías y una placa que identifica la jerarquía del empleado policial.
De esta forma, estos operativos se ejecutaron en el marco de medidas de allanamientos realizados el viernes pasado por orden del juez penal Francisco Pisa, en los domicilios de los sospechosos. El vehículo fue hallado en una vivienda del Pasaje Miguel Román y calle Pio XII de la Capital.
"Se trata de una banda integrada al menos por ocho personas que se dedica a asaltar a mano armada en viviendas particulares. Esta vez lo hicieron en la casa del propietario de una carnicería, con armas de fuego y algunos de ellos, vestidos de policías", explicó el subcomisario, Nicolás Toledo.
"Todos cuentan con antecedentes policiales y judiciales. El vehículo y los elementos secuestrados fueron puestos a disposición de la fiscal quien debe decidir nuevas medidas para avanzar en la investigación y dar con los sospechosos", agregó Toledo. La pesquisa judicial está en manos de la fiscal Especializada en Robos y Hurtos, Adriana Reynoso Cuello.