El Consejo Profesional de Ingeniería de Tucumán (COPIT) donó al Ministerio de Salud Pública cabinas de manos sanitizantes, en el marco de la lucha contra el coronavirus. Este es un prototipo que fue desarrollado por los ingenieros del COPIT en conjunto con el Siprosa. Este martes se instalaron los primeros cinco en la zona céntrica de la Capital.
Los sanitizantes se colocaron en las esquinas de: Muñecas y San Martín; San Martín y Maipú; 25 de Mayo y Mendoza; Mendoza y Muñecas y en Junín y Mendoza. En tanto, la ministra de Salud Pública, Rossana Chahla, indicó que este es el momento oportuno, ya que se habilitó la apertura de los comercios.
"Que las personas tengan un lugar dónde ponerse alcohol o higienizarse es un gran aporte, ya que la zona céntrica es un lugar de mucho tránsito y no siempre contamos con alcohol en gel con nosotros", remarcó Chahla y resaltó que estos dispositivos vinieron a replantear una situación que era muy común; la estar con las manos sin desinfectarse.
"Trataremos de ponerlos en lugares donde haya mayor circulación de personas", afirmó. El sanitizante de manos contiene un bidón de 15 litros de alcohol al 70 por ciento, realizado por la Farmacia Oficial. No obstante, los especialistas aseguran que lavarse las manos con jabón y agua sigue siendo la mejor opción.
Es necesario que las manos se encuentren libres de suciedad o grasa antes de la aplicación; de lo contrario, el desinfectante no hará bien su trabajo. Por su parte, el director de Informática y Comunicaciones del Siprosa, Omar Abraham, explicó que estos dispositivos funcionan con un sensor de ultrasonido.
De esta forma, el aparato detecta cuando la persona coloca la mano debajo del mismo y activa una bomba que genera un pequeño chorrito de alcohol (70/30) que le permite a las personas sanitizar sus manos.
“El proyecto fue del Consejo Profesional de la Ingeniería que nos donó el prototipo y los planos del mismo, el área operativa hizo la parte de chapa y toda la gente de informática realizaron la electrónica e instalación del mismo”, finalizó Abraham.
