El cónclave que se llevó a cabo en la sede de la Secretaría de Trabajo entre representantes de las empresas que concesionan el transporte público y dirigentes de UTA no llegó a buen puerto y decidieron pasar a un cuarto intermedio.
Ambas partes manifestaron su preocupación por el presente que atraviesa el transporte y a la salida expresaron su malestar por la nula presencia de alguna entidad gubernamental. "Lamentablemente no hubo ningún ente gubernamental para dar respuestas. Seguimos en la situación de precariedad y de incertidumbre de cómo se va a continuar", expresó Hugo Peralta, gerente de Ersa.
"Nuestra postura es stand by, esperando que alguien nos acerque una propuesta para ver cómo se continúa con la prestación del servicio. Si con subsidios es muy difícil continuar, sin ellos ya es imposible", comentó acerca de la posibilidad que la empresa abandone la provincia.
Por último, Peralta dejó en claro que no quieren irse de Santiago del Estero. "Ersa no tiene ninguna intención (de irse); este es un negocio y hay que explotarlo, y sin subsidios, sin una tarifa acorde, una compensación o que medie algo, no se puede continuar. Los costos no pueden superar los ingresos", cerró en diálogo con El Liberal.