Mitre se hizo fuerte como local y consiguió un triunfo tan importante como necesario para cortar una mini racha negativa, y volver a meterse en la conversación por los primeros puestos. El Aurinegro venció a Temperley por 2 a 1, con goles de Ismael Blanco y Alan Bonansea, mientras que Ramiro Costa, de penal, descontó a un minuto del final.
El equipo dirigido por Alfredo Grelak fue superior desde el comienzo del juego, pero no estuvo efectivo de cara al arco para concretar las opciones que fue generando. Pero a los 28 minutos, apareció Blanco para capitalizar un rebote y anotar el primer tanto.
El Gasolero, que salió jugar el encuentro pegado a su área, se vio obligado a salir y le brindó muchos espacios, que el anfitrión no pudo aprovechar para ampliar la ventaja y se fue al descanso ganando por la mínima.
En el segundo tiempo, el Aurinegro fue el que siguió teniendo las riendas del cotejo y marcando el ritmo, pero siguió despilfarrando oportunidades. Por eso Grelak decidió mandar a Bonansea a la cancha y en la primera que tocó, la mando adentro del arco para obtener una diferencia tranquilizadora.
El Celeste, sin ideas, pero con amor propio fue al frente y a través de un penal, a los 44 minutos, pudo descontar gracias a la buena ejecución de Costa, pero ya era demasiado tarde para cambiar el curso de la historia. Mitre se quedó con tres puntos importantes y promete seguir dando pelea en el Nacional B.