Desde el día en que tomó estado público la desaparición de Emiliano Sala cuando viajaba solo con el piloto en un pequeño avión desde Nantes hacia Cardiff, Martín Molteni, amigo cercano del delantero, se convirtió en Argentina en uno de los allegados que se animó a describir con precisión la personalidad del deportista, a quien todos los que lo llegaron a conocer lo exponen como una persona muy generosa.
En ocasiones con al voz entrecortada, Molteni se encargó de relatar momentos fundamentales en la vida del joven que nació en Cululú, pero que se formó como deportista en Progreso.
La última vez que Molteni y Sala se vieron fue en Francia, cuando junto con su padre, Martín compartió varias horas con su mejor amigo y el resto del plantel del Nantes.
Ahora, en medio de la angustiante espera, y mientras muchos ya parecen haber bajado los brazos respecto de encontrar con vida al futbolista, Martín apeló a las redes sociales y en Facebook recordó una particular anécdota que es testimonio de cómo era Sala con sus más cercanos.
La escena en cuestión transcurrió el 15 de mayo de 2018. “Con mi papá fuimos a visitarlo a Nantes durante la última semana de entrenamientos y se acostumbra hacer un encuentro para despedir el año con sponsors, dirigentes, jugadores, cuerpo técnico, etc. en el medio del estadio.”, mencionó Martín en Facebook.
En dicho al parecer solo tenían permitido el ingreso los jugadores y el cuerpo técnico. "Cuando le dicen esto, se plantó: 'O entran mis dos amigos o yo no voy'. Y al ídolo se lo respeta. Ahí estuvimos, un día que jamás vamos a olvidar", selló Molteni el relato que cosechó cientos de comentarios y estuvo acompañado por una foto de aquella jornada.