La policía santafesina inició un operativo de búsqueda inusual este domingo en la ciudad a partir de la denuncia de un paciente prófugo del Hospital Cullen. Lo particular de la situación es que no estaba bajo custodia en el nosocomio, sino que se trata de un hombre al que atendieron al advertir que podía tener coronavirus.
Como contrapeso de la caída en la cantidad de aprehensiones por incumplir la cuarentena en la provincia, el episodio trascendió cuando el personal del efector descubrió que la persona a la que recibieron en la guardia se había ido antes de recibir el diagnóstico. Dado que tenía síntomas compatibles con COVID-19, decidieron avisar a las fuerzas de seguridad lo que había ocurrido.
Fuentes consultadas por El Litoral detallaron que el acusado presentaba una "patología respiratoria" pero desmintieron que fuera un nuevo caso de la enfermedad que ya contrajeron más de 160 santafesinos. No obstante, confirmaron que le hicieron algunos análisis previos a su retirada.
Al reconstruir la secuencia, los testigos apuntaron que el paciente decidió irse a pesar de que no habían terminado de hacerle los estudios de rigor. Así lo vieron salir por Avenida Freyre y Salta, donde una mujer lo esperaba a bordo de una motocicleta. Así, la policía puso en marcha inspecciones en taxis y colectivos para tratar de dar con él.