Gustavo Miras, presidente de la Cámara de Comercio de Malargüe se diferenció sustancialmente de sus pares de San Rafael y General Alvear y defendió la construcción de Portezuelo del Viento tal cual como está y pidieron que el trasvase del río Grande al Atuel se analice más adelante.
En el discurso durante el almuerzo de las fuerzas vivas por el 70 aniversario de Malargüe, Miras también hizo mención a un viejo reclamo, la concreción de la ruta 188 en el tramo de General Alvear hasta el departamento. También criticó con dureza la extensa cuarentena y su impacto en el sector turístico.
Con el protocolo de restaurante vigente actualmente en la provincia (reservas previas, mesas de 6 personas y con la capacidad del local al menos del 75 % de su ocupación) y transmisión on line para quienes no pudieron acceder o se encontraban en otros puntos del departamento o la provincia, la Cámara empresaria malargüina fue la primera el regresar a los tradicionales almuerzos presenciales.
El gobernador Rodolfo Suárez no asistió, pero a él estuvo dirigido el discurso del titular de la entidad anfitriona.
“Hoy plantamos la bandera de dejar de ser el departamento zonzo de Mendoza, del que todos solo ven oportunidades. Nos ponemos firmes, para dialogar con madurez y sensatez, proponemos que avancemos en la Mendoza que diversifique su matriz productiva para bien de nuestra querida Argentina”, afirmó.
Seguidamente se diferenció de los planteos formulados en el último mes por las Cámara de Alvear y San Rafael en relación a postergar el actual proceso licitatorio de Portezuelo del viento para realizar los estudios del trasvase del río Grande al Atuel.
“Nos alegra que el proceso de licitación de Portezuelo de viento siga avanzando. Apoyamos desde esta Cámara la realización de la presa para la generación de energía y las demás obras complementarias. Asimismo, nos expresamos contra los argumentos de aquellos que en el último mes han venido a plantear la posibilidad de cambiar el formato de obra” dijo Miras.
“Consideramos que una vez licitada y comenzada la obra Portezuelo, como hoy está formulada, llegará el tiempo de plantear la discusión respecto del trasvase del río Grande al Atuel, que estamos dispuesto a darla, pero repito, en el momento adecuado, que no es hoy”, añadió.
“No tiraremos por la borda, por aquellos que de manera extemporánea ponen en duda un proceso licitatorio, que ponen en duda que la obra de Portezuelo del Viento sea la obra que realmente beneficia a toda la provincia y sobre todo al sur mendocino, en resarcimiento al perjuicio por la promoción industrial otorgada a las provincias vecinas. No permitiremos bastardear nuestro desarrollo nuevamente como lo hicieron con la minería”, puntualizó enérgicamente el dirigente.
Pedidos a la clase política
Tras agradecer al gobernador Suárez el impulso que intentó darle a la minería en el inicio de su gestión se mostró esperanzado en la culminación y explotación del proyecto Potasio Rio Colorado, Ex Vale, hoy con sus activos en poder de la provincia.
“El crecimiento del Malargüe que soñamos requiere de la conectividad aérea y terrestre. Nos duele tener un aeropuerto, con posibilidades de internacionalizarse, cerrado. Nos duele el estado de la ruta nacional 40 desde Bardas Blancas hasta el ingreso a Calmuco. Nos duele que ni la nación y la provincia no hayan cumplido con el compromiso asumido con la Agencia Espacial Europea para pavimentar los primeros kilómetros de la ruta provincial 186, la ruta productiva por excelencia de Malargüe que hoy está en un estado deplorable. Nos duele que todavía no se hayan terminado los estudios definitivos de la nueva traza de la ruta nacional 188. Nos duele las huellas por las que deben transitar nuestros productores ganaderos, de por sí afectados por la falta de acceso a la propiedad de la tierra, la matanza de la producción por parte del puma y el zorro, la falta de una política seria de comercialización y de radicación de la gente joven en las zonas rurales. Nos duele el estado de los accesos terrestre a los principales atractivos turísticos de Malargüe”, indicó.
Al repasar las actividades económicas de Malargüe sostuvo que la extensa cuarentena impuesta desde la nación ha hecho estragos en el sector turístico, que denunció “se está quedando sin su principal sostén, las personas, la gente que sabe y conoce de la materia. Sin servicios en cada uno de nuestras bellezas naturales, sin rutas de acceso, se hace muy difícil poder ser de manera definitiva un destino turístico por excelencia. Necesitamos se cuide al privado, al que legalmente y con todas las medidas de seguridad y protocolos vigentes ejerce tan digna actividad y se castigue a quien no cumple y obtiene beneficios de quienes nos visitan poniendo en riesgo tan hermosa actividad que derrama ingresos a toda una población”.