Los amantes de los Chevrolet en San Rafael dejaron de lado las historias fierreras de su marca favorita para pasar a la acción pero solidaria.
Los integrantes del grupo "Mi Viejo Chevrolet" reunieron mercadería y las entregaron a dos merenderos.
Las cajas de leche, bolsas de azúcar y hasta vasos tuvieron como destino el merendero Sapo Pepe que funciona en el callejón Las Rosas, de Cuadro Benegas, y el Mil Travesuras que está en las inmediaciones de la Rotonda del Cristo, en Las Paredes.
A partir del fanatismo por una marca "los fines de semana nos juntamos para darle rienda a esta pasión que nos une y que se llama Chevrolet. Gracias a los fierros tejimos una amistad, por eso nos sentimos muy felices”, contaron los miembros del grupo.
De esa amistad y tiempo compartido surgió la idea de colaborar con una entidad social y la mejor opción fue la de los merenderos qeu tanto hacen por los niños.
"Nos propusimos ayudar y lo hicimos. Pasamos divertidos momentos con los chicos, les dimos una mano a quienes llevan adelante la enorme tarea de mantener los merenderos. La solidaridad es un valor innegociable y la vamos a pregonar siempre en beneficio de quienes más la necesitan", contaron a Diario San Rafael.
No es la primera vez que actuan solidariamente. en noviembre la agrupación "Mi viejo Chevrolet" organizó una rifa y con el dinero que juntaron compraron mercadería para el merendero Sueñitos en la Isla del Río Diamante. Fuente: