La oficial de la Policía Local, Brenda Gasparri, quedó imputada por el homicidio en marzo pasado de Mauro Garfagnoli y continúa con arresto domiciliario. Sin embargo, en las últimas horas, trascendieron novedades en torno al caso que dejarían una puerta abierta para su posible liberación.
Es que un nuevo informe médico oficial prueba que el disparo que recibió la víctima no fue directo y por la espalda; sino indirecto, por rebote y lateralizado. Esto acreditaría la falta de dolo, debilitando la acusación de Fiscalía.
Por su parte, la defensa hizo un pedido de ampliación pericial al médico forense de la causa y, según apuntó El Informante, también confirma que el orificio de entrada del proyectil presenta "bisel irregular" y que el ingreso es "tangencial no en forma directa o perpendicular del tirador a la víctima".
En tal sentido, se solicitó al Juez de Garantías que este martes se realice una audiencia pública para resolver la situación procesal de la imputada, pese a haberse negado a prestar declaración.
Con estas pruebas, el abogado de la defensa, el Dr. Julián Domínguez, pediría la liberación inmediata de Gasparri. En tanto, expresó que "policialmente estamos convencidos de que Brenda actuó en cumplimento de su deber en circunstancias extraordinarias y poniendo en riesgo su propia vida".