Laura Cristal es de San Luis, es mamá de 7 hijos y a sus 37 años atraviesa por una situación desesperante. Tras haber contraído Covid-19, las secuelas la han dejado en muy mal estado de salud. En entrevista contó la odisea vivida tras los malos tratos en la salud pública y su situación económica que no le permite acudir a un mejor servicio.
Como si fuera poco, la mujer se encuentra en Juicio Alimentario con el padre de sus hijos y, además, atraviesa por un estado de desnutrición. Actualmente está en los 32 kilos y su salud peligra aún más.
“Desde el 8 de enero vengo pidiendo ayuda. He quedado con secuelas en mis pulmones y no he tenido solución”, relató Laura con respecto a su etapa pos-covid.
La pésima atención que recibió en la Salud Pública
Desde el Hospital Cerro de la Cruz de San Luis capital, le dijeron que no había nada, que eran síntomas de índole psicológico. “Me mandaban al psicólogo cada vez que llamaba a la ambulancia porque no podía respirar”, contó en entrevista a Vía San Luis.
Desde el nosocomio se agarraron de una serie de hechos para pensar como lo hicieron. La mamá de Laura falleció recientemente por las secuelas que le dejo el Covid-19, sumado a su situación económica y judicial con su marido. Pero esto no se encuentra ni cerca de justificar su accionar.
“Tomaron como que era todo psicológico, como que yo estaba deprimida. No me llamaban para ver cómo estaba. Me decían que era un ataque de pánico, pero yo no podía respirar. Me dolían mucho los pulmones, no podía dormir por el dolor”, dijo la mujer a Vía San Luis.
“Me dijeron que era angustia, que respirara hondo, que me tomara un ibuprofeno y me acostara”, añadió sobre esta situación.
Otra situación insólita, además, le ocurrió en ese mismo lugar: le dijeron que sus dolores de garganta podrían haber sido por habérsele atorado una espina de pescado. “Yo me reía de eso. Por mi situación económica muchas veces no puedo comprar carne. Hay veces que no tengo para comer”, explicó Laura.
El diagnóstico del centro de salud privado
Lo cierto es que una noche que no podía dormir por su dolor y, a causa de que no podía respirar, Laura decidió agarrar a su bebé de 3 meses y acudir a una clínica privada. Para ello tuvo que pedir dinero prestado a una amiga que la ayudó.
En aquel lugar le hicieron estudios y el resultado arrojó que la mujer sufre de una hiperclaridad bilateral pulmonar, es decir, una reducción del árbol vascular pulmonar y/o la destrucción del parénquima pulmonar.
Su pedido de ayuda
La mujer, tras pasar por una terrible situación y encontrarse gravemente desnutrida y sin poder respirar correctamente, pide ayuda a la comunidad para poder acudir a un adecuado tratamiento médico. Allí, su intención es realizarse los estudios pertinentes para solucionar su problema.
“Tengo una nena de 3 meses y 6 hijos más. Tengo que seguir adelante”, comentó. Además, aclaró que lamentablemente no está recibiendo ayuda alguna del Estado.
Quienes quieran comunicarse con ella pueden hacerlo al 266 5136065. A este mismo número, quienes estén dispuestos a ayudar, también pueden hacer envíos de dinero por Mercado Pago.