Hace 15 años los cuatro tigres de San Luis no conocían lo que era la libertad. Los dos felinos más chicos e hijos de la pareja mayor, nunca conocieron otra cosa que el vagón de tren donde permanecieron toda su vida. Pero esa novela de terror hoy llegó a su fin. Finalmente, los animales fueron liberados.
En la madrugada de este sábado, todo el equipo de rescate de la organización Four Paws International, junto a los cuatro tigres, arribaron al Santuario para Grandes Felinos “LionsRock” de Sudáfrica.
Desde las redes de la organización mostraron cómo fue el procedimiento desde que el avión llegó desde Ámsterdam a Sudáfrica, hasta que liberaron a cada uno de los animales en dicho lugar.
La historia del rescate de los tigres del tren de San Luis
Todo comenzó el pasado miércoles. Las tareas del emocionante rescate comenzaron tras días de planificación y logística por parte del equipo transnacional de Four Paws, que cuenta con una argentina entre sus filas.
En primera instancia, los tigres fueron sacados de los vagones de tren y puestos en “cajas” para lo que fue la primera etapa del rescate. Tras entrar los felinos en estos habitáculos, los mismos fueron depositados en un camión que los traslado hacia Buenos Aires.
Tras el arribo a la capital argentina el día jueves, todo el equipo de rescate junto a los animales emprendieron viaje hacia Ámsterdam, donde hicieron escala previo al destino final de Messi, Mafalda, Gustavo y Sandro (nombres que recibieron tras una encuesta en las redes).
En Países Bajos debieron esperar unas horas, pero finalmente el día viernes todos partieron hacia el destino final: Sudáfrica. Allí los tigres, en la madrugada argentina de este sábado, fueron liberados en ambientes cerrados dentro del santuario.
Una novela con final feliz. Tras 15 años aprisionados, los cuatro grandes felinos de San Luis conocieron la libertad y la disfrutan con tranquilidad y curiosidad.
