El miércoles pasadas las 20 los Bomberos de la Policía de San Luis recibieron un llamado del 911 que les advirtió que un caballo había quedado atrapado dentro de un pozo séptico en una vivienda del barrio 9 de Julio, de la ciudad de San Luis. Los rescatistas excavaron por más de dos horas una rampa para que el animal pudiera salir de nuevo a la superficie, afortunadamente ileso.
El jefe del Cuartel Central, oficial principal Enrique Sánchez, explicó que el aviso les llegó pasadas las 20:20, cuando la dotación del móvil 1-367 regresaba de apagar un incendio.
Jonathan Cabañez, dueño del caballo, los esperaba desesperado en la casa 3 de la manzana A1 del barrio 9 de Julio. El animal había quedado enterrado entre el barro y las aguas servidas de un pozo séptico, a unos tres metros de profundidad, luego de que la superficie se derrumbara, por el peso del animal.
El operativo duró hasta las 23, los cuatro bomberos cavaron una especie de rampa paralela al pozo, sacaron con palas parte del barro que aprisionaba al animal e idearon un sistema de cuerdas para jalarlo hacia arriba.
Afortunadamente el operativo salió a la perfección y el animal fue rescatado sin lesiones. Un final feliz.