La Escuela Nº2 "Paula Domínguez de Bazán", de la ciudad de San Luis, vive el fin de un símbolo y de una tradición, ya que las alumnas que conforman la agrupación "Jóvenes en acción", del centro de estudiantes, propusieron la modificación del tradicional uniforme, que consta de un guardapolvo blanco y un moño azul en el cuello, por un equipo de gimnasia. Los directivos aceptaron la idea.
Luego de la conformación del centro de estudiantes, los directivos aceptaron la idea de las alumnas. El Chorrillero publicó que durante las elecciones, había un buzón de "sugerencias" y que el tema del cambio del uniforme fue uno de los más solicitados.
La elaboración del proyecto consistió en que el delantal con el moño azul fuera sustituido por la vestimenta utilizada para educación física. De esta manera, el uniforme diario incluirá pantalón azul marino, remera blanca con el logo del establecimiento y zapatillas negras, blancas o grises. El actual pasará a ser "opcional" y obligatorio para "desfiles o actos importantes".
La presidenta del centro de estudiantes, Sofía Lucioni, aclaró que el uso del guardapolvo no se eliminó sino que se dio flexibilidad para aquellas alumnas que quieran asistir con la indumentaria alternativa.
Por su parte, la directora de la escuela, Lilian Wanzo se mostró de acuerdo con el cambio que por el momento solo abarcará al nivel secundario, porque "las alumnas ya lo venían pidiendo hace varios años" y agregó que en épocas invernales las chicas no podían respetar el uniforme debido a las bajas temperaturas, mientras que ahora "no habrá inconvenientes".
El reglamento de la institución no permite el uso de pantalón largo debajo del guardapolvo, salvo casos excepcionales. Wanzo aseguró que la resolución también tuvo el respaldo de tutores y docentes.
Una escuela histórica en San Luis
El establecimiento fue fundado en 1872 a través de un decreto del gobernador Juan Ortiz Estrada. En ese entonces era conocida como la "Normal de Mujeres", en 1926 recibió su actual nombre.
Desde sus comienzos el uniforme de las alumnas consistió en el guardapolvo blanco, primero era el que se prendía adelante, más tarde el que lo hacia atrás. Con el paso de los años se sumó otro emblema como lo fue el moño azul prendido en el cuello.
La histórica noticia fue difundida por las alumnas a través de las redes sociales. En la publicación enseguida se generó un debate entre quienes están a favor y aquellos que están en contra.
Las valoraciones positivas tuvieron en cuenta que se trató de un “avance enorme” porque las chicas hicieron “escuchar su voz”. A su vez señalaron la “incomodidad” del uso del guardapolvo y el “frío” por el que debían atravesar.
Por el lado contrario, hubo críticas por los “años de lucha” para conformar el centro de estudiantes y que una vez logrado, voten esa iniciativa, también por considerar que el delantal es “un símbolo del colegio” y porque “no valoran el uniforme”.
El próximo año, el proyecto podría ser impulsado por los padres de alumnas de la primaria que se mostraron de acuerdo con el cambio.